Extraña primavera
Fue una extraña primavera,
las flores se abrieron,
pero no hubo nadie que las oliera,
su perfume quedó marchito,
esperando a que tú vinieras,
pensaron que no las querías,
no supieron el porqué de la espera,
creyeron que otra vez renacerían,
posiblemente en una próxima…
y, de nuevo, ¡feliz primavera!