Qué fuese de mi,
sin tu displicencia,
esa transparencia,
que te envuelve
y, que me alumbra,
guía mi indiferencia,
desleal y sombría
y, me hace respirar,
sonreír y agitar,
razonada elocuencia,
qué sería de mi,
sin tu sola presencia.
Qué fuese de mi,
sin tu displicencia,
esa transparencia,
que te envuelve
y, que me alumbra,
guía mi indiferencia,
desleal y sombría
y, me hace respirar,
sonreír y agitar,
razonada elocuencia,
qué sería de mi,
sin tu sola presencia.