Infierno
El asfalto repele el calor,
secador de aire candente,
el cielo está tan encendido,
cual intenso hierro en fogón.
La canícula es insufrible,
bochorno cubierto de ardor,
es tan tórrida tu seca vida,
como brasa en combustión.
El sofoco que te incendia,
abrasa quemando el fervor,
dale candela y, haz lumbre,
o arderás en cabal ignición.