Hemos perdido el juicio,
se nubla la razón,
no hay entendimiento,
el hombre contra el hombre,
un lobo que aniquila a su igual,
retrasmitido en directo,
visto como rutina,
como una serie más de Netflix,
y seguimos mirando hacia otro lado,
engullendo los pedazos de carne,
que bien pudiera ser de los muertos que vemos,
y sin enterarnos,
continuaremos haciendo la digestión,
un día tras otro,
y cagando, expulsando la mierda que llevamos dentro.